Por el castigo a los autores materiales e intelectuales del Crimen de Estado
Eran las tres de la mañana de aquel 24 de agosto de 2020, un año en el que padecimos los efectos de una pandemia que vino a recrudecer la crisis económica en el mundo, en México y en Oaxaca, a esa hora, Don Tomás ya se preparaba junto con los contingentes de la Sierra Sur, para arribar a la ciudad de Oaxaca y participar en la jornada por PAN, SALUD Y TRABAJO, misma que llevábamos organizando con algunas semanas de anticipación, pues era necesario salir a las calles ante todos los atropellos que estábamos recibiendo en las comunidades, en las que no contamos con luz eléctrica, agua potable y que a pesar de estar en fechas críticas en cuestión de sanidad, dejaron de llegar los pocos medicamentos con los que contábamos en nuestros centros de salud.
Ese día, por la tarde, después de haber culminado nuestras actividades y mientras organizábamos el regreso de todos los contingentes, un equipo de sicarios dio seguimiento a nuestro compañero Tomás, hasta alcanzarlo en Animas Trujano en donde le dispararon a quema ropa, arrebatándole la vida y dejando mal herido a su acompañante Reginaldo García; el homicidio de Tomás Martínez sucedió en un contexto en donde a los defensores del territorio, la tierra y la vida se les criminaliza por educar a los pueblos a defender sus recursos naturales, a no permitir que los cacicazgos locales les arrebaten lo más valioso que tienen.
Tomás no fue un dirigente popular más, Tomás era un verdadero líder nato de la sierra Sur, que recorrió gran parte de nuestro estado sembrando la semilla de lucha, fue una persona completamente congruente con sus hechos y sus palabras, esos fueron los motivos por los que para algunos grupos caciquiles Don Tomás representaba una gran amenaza a sus intereses de saquear y robar a nuestras comunidades, por eso, mataron a nuestro camarada Tomás.
Este 23 de abril se llevará a cabo la audiencia de los otros dos implicados en el homicidio de Tomás Martínez y tentativa de homicidio en contra de Reginaldo García, audiencia en la que esperamos que el juez imponga una pena ejemplar, que demuestre a la sociedad que el asesinato de un defensor de derechos humanos no debe ni quedará en la impunidad.
Hoy dejamos de manifiesto que nuestra lucha por justicia seguirá, pues sabemos que todavía no se ha llevado ante un tribunal a aquellos que ordenaron el homicidio de Tomás Martínez, los autores intelectuales siguen libres.
Exhortamos al gobierno estatal a que no cobije, o encubra a estos personajes de corbata y cuello blanco.
Hacemos un llamado a todas las organizaciones populares de Oaxaca a conformar espacios de unidad y lucha, espacios que den cobertura a todas y todos aquellos que lucha por una vida más justa y que en su paso por cambiar la realidad son agredidos y amenazados, no debemos permitir que nos sigan arrebatando compañeros.
¡TOMÁS NO MURIÓ, EL ESTADO LO MATÓ!
¡JUSTICIA PARA TOMÁS MARTÍNEZ!
¡TOMÁS MARTÍNEZ VIVE EN LA LUCHA DE LOS PUEBLOS!
Oaxaca, Ciudad de la Resistencia a 23 de abril de 2024.